Penes y vulvas (I)
Pudor ninguno, polémica mucha. La inmovilización cautelar de un autobús de la organización ‘Hazte oir’ con el lema “Los niños tienen pene, las niñas tienen vulva. Que no te engañen” ha desatado un aluvión de críticas por incitar al odio transfóbico.
La campaña surge como respuesta a otra anterior organizada por Chrysalis, una asociación de familias con menores trasgénero que, con el mensaje “Hay niñas con pene y niños con vulva. Así de sencillo”, colgó afiches callejeros con un dibujo de niños desnudos lo que fue denunciado por corrupción de menores.
Unos y otros confunden a todos. Los primeros no dicen exactamente estar en contra de los transexuales aunque los segundos así lo interpreten, y los familiares con niños transexuales han explicado muy mal lo que les pasa a sus hijos y por eso tampoco se entiende su mensaje.
La ideología es nefasta para explicar y menos aún defender una postura u otra. La ciencia es la que debe hacerlo. Hay un sexo genético bipartito, masculino y femenino, que se expresa en un aspecto físico determinado masculino o femenino. A veces hay fallos y esto se altera, es el caso de los hermafroditas o intergénero. Pero aún con un cuerpo claramente masculino o femenino la identificación sexual puede ser diferente ¿Cómo actuar en estos casos?
Está claro que la respuesta la tiene que dar la sociedad dialogando, enseñando y sobretodo destacando la tolerancia y comprensión hacia la diferencia
Me gusto la primera frase del articulo…”pudor, ninguno” …asi, tal cual lo siento yo. Que tiempos nos han tocado vivir!…
Pero que dice.??? Ahora resulta que decir la verdad confunde.
Sí, HC. Confunde. Porque no sólo se trata de decir la verdad sino de saber explicarla y, sobretodo, tener una base científica para afirmarla. Por eso digo que la ideología es nefasta para explicar ideas y menos aún aplicarlas. Hay que basarse en la ciencia que es la única que demuestra, mediante el método científico, cual es la verdad
Sr. Skibinsky,
Le diré que estoy totalmente de acuerdo con lo que articula. Mucha polémica, y muy absurda. Y además, grandes dosis de intolerancia por ambos bandos.
Si uno ni lo quiere ni lo es, que no lo sea, y si otro lo es, pues que haga lo que quiera.
Buenas noches