Trabajarse la vida
Bieiro Rubido.- En la asimetría moral en la que vive España, todos tenemos una parte de culpa. Unos por practicarla sin el más mínimo rubor y otros, la mayoría, por mirar hacia otro lado. Por eso campan a sus anchas los falsos paradigmas y los debates mentirosos, a los que tanto rédito han sacado la extrema izquierda y sus terminales mediáticas.
Que Pablo Iglesias haya dicho que azotaría a una periodista hasta que sangrase me parece repugnante. Que el mismo personaje, aspirante a gobernar nuestro país, justifique a su compañero Echenique por no pagar la Seguridad Social de un trabajador es una impostura moral que no supera los mínimos estándares de calidad democrática. Que Monedero haya distraído fondos de su propia universidad evidencia que sus principios éticos son más móviles que las arenas de una duna. ¿Qué estaríamos diciendo si cualquiera de estos episodios los protagonizase algún dirigente de la derecha española?
En lugar de trabajarse tanto la imagen, los de Podemos deberían trabajarse un poco más la vida.