¿Por qué la intelectualidad progresista ama a los inmigrantes y desprecia a la clase trabajadora (nativa)?
Por León Riente/R.-Principalmente por dos motivos: por un interés de casta, en primer lugar, y como consecuencia de los postulados de su propio esquema ideológico, en segundo. Para que el primer motivo se traduzca en arrebatado amor por los inmigrantes, resulta imprescindible una condición: la completa ignorancia, por parte de los intelectuales progresistas, de la naturaleza del nuevo sujeto histórico por ellos formulado, las masas inmigrantes. Para que lo haga el segundo es ineludible otra: la ignorancia de la historia por esta intelectualidad.
La intelectualidad progresista pretende que una abigarrada masa inmigrante haga para ellos lo que no ha querido hacer la clase trabajadora (nativa). La intelectualidad progresista ama a los inmigrantes porque cree que esa masa heterogénea es capaz de hacer la revolución necesaria para que ellos alcancen el poder en los distintos estados de Europa. Para ello es imprescindible un desconocimiento a conciencia (un autoengaño) de la realidad de las masas inmigrantes. Estas masas tienden, tal y como nos enseña Mahieu en Fundamentos de biopolítica bien a la asimilación y al mestizaje, bien a la rebelión, formando, como es muy lógico, sus propias agrupaciones etno-políticas, en las que el papel de la intelligentsia progresista europea deviene residual (caso de las agrupaciones etno-políticas amerindias, mestizoamericanas y negras) o nulo (caso de las agrupaciones etno-políticas musulmanas y chinas).
Pero la intelectualidad progresista también ama a los inmigrantes porque quiere hacerse perdonar, o mejor, pretende que la sociedad de cada estado europeo se haga perdonar por estos inmigrantes. Un estudio sesgado de la historia mundial hace que los fenómenos coloniales europeos a partir de la Edad Moderna cobren exclusividad en lo que hace al fenómeno colonial y al sojuzgamiento de unos pueblos por otros, para la intelectualidad progresista. Ellos creen que estas sociedades tienen contraída una grave deuda con el resto del mundo y que son culpables. Intenta por todos los medios, absurdamente autoerigida en conciencia crítica de ellas, extender la culpa y hacerles pagar por lo que, según dicen, hicieron. Ignora necesariamente para ello, porque si no el esquema se caería en un momento, el resto de la historia mundial y las distintas imposiciones coloniales y conquistas territoriales que unos y otros pueblos, europeos o no europeos, han protagonizado. En este contexto se explica la ignorancia progresista de la extensión y del significado histórico del fenómeno de la esclavitud.
Estos dos supuestas misiones históricas a cumplir por la masa inmigrante (hacer la revolución de la intelectualidad progresista y cobrarse la supuesta deuda contraída por el fenómeno colonial europeo desde la Modernidad, proceso que mediante teorías parciales también de indudable raigambre marxista extienden hasta el momento presente, como si la burguesía nacional representase hoy algún papel digno de importancia en relación a la superburguesía o hiperclase mundialista) explican el amor interesado de la intelectualidad progresista por las masas inmigrantes. Esto explica, asimismo, que semejante amor progresista por la inmigración nunca se haya traducido en la reivindicación, por parte de estos intelectuales, del derecho de las personas inmigrantes a vivir en sus respectivos países con dignidad.
El desprecio y el abandono en el que la intelligentsia progresista ha dejado a la clase trabajadora nativa de los distintos estados de Europa, tras varios decenios en los que se hizo pasar como su legítimo representante ideológico, trivializando o calificando de farsa todo intento de los trabajadores de disponer de sus propios representantes ideológicos y culturales, surge exactamente del mismo proceso que explica el reciente amor por la masa inmigrante. Una clase trabajadora nativa que se niega a dar el poder a la conspicua casta intelectual progresista, ya no le resulta de utilidad a esta última. Los intelectuales progresistas desprecian a la clase trabajadora, por no haberles alzado al poder, mediante revolución o de cualquier otra forma. Por otro lado, si complejos procesos psicológicos, en los que no están ausentes sentimientos ciertos de inferioridad personal del propio intelectual progresista (problema personalísimo al que pretende dar solución social), hacen aparecer y situar en el primero plano incomprensibles preocupaciones de reparación histórica, que además de unilaterales y arbitrarias son imposibles, porque la historia ni retrocede ni se detiene, la clase trabajadora nativa deja de verse como acreedora y pasa a representar el papel de deudora. Y por lo ocurrido, deudora nata, pues es esta clase la que ha pagado y sigue pagando los platos rotos de la inmigración masiva ante el silencio cómplice, o en muchos casos la celebración entusiástica, de los intelectuales progresistas.
La intelectualidad progresista como tonto útil del capitalismo. Es el papel necesario que asume la intelectualidad progresista en todo este proceso. La inmigración masiva, contraparte demográfica de otras mundializaciones (económica, social, política, cultural, etc.) impuestas por el desarrollo del capitalismo (mundialización o globalización como fase ulterior del capitalismo), es decir, la inmigración masiva como elemento consustancial a esta fase del capitalismo en que nos encontramos, antes que discutida es justificada por la intelectualidad progresista frente a los temores y rechazos del pueblo, rindiendo así estos progresistas un servicio impagable a la superburguesía y cumpliendo así esta intelectualidad un papel imposible de desarrollar por parte de la intelectualidad propia y nominalmente burguesa, dado el reducido favor popular de esta última.
Nos encontramos así a la intelectualidad progresista no sólo manifestando una pose burguesa fruto del abrazo del democratismo y de la ideología de los derechos humanos (amalgama de marxismo y liberalismo), así como del origen de clase netamente burgués de la mayoría de intelectuales progresistas; también cumpliendo una actuación esencial para los objetivos de dominio a medio y largo plazo de la superburguesía hoy dominante en los distintos estados europeos y en otros muchos no europeos.
Por la propia utilidad, para el capitalismo, y para sus clases rectores, del marxismo (cultural) y de la intelectualidad progresista como casta que desarrolla esta ideología, a esta casta intelectual le va tan bien en los aparatos ideológicos de los distintos estados donde medra. Aún así, hay que reconocerle a la casta intelectual progresista una capacidad de infiltración notable en las instancias productores de ideología (como los organismos educativos o los medios de comunicación de masas).
Actúan así, porque ven al currante local como al mulo resabiado, cansado y viejo que sólo tira cuando quiere, que ha adquirido unos derechos que no le va bien al patrón.
Los borriquillos nuevos, piensan ellos, currarán más y comerán menos. Además, hasta que consigan papeles y derechos pasará algún tiempo, y cuando los consigan se importan nuevos borriquillos.
O nos los cargamos, o se nos cargan.
TENÍA mis dudas sobre la existencia real del Plan Kalergi…
Estos Retro-Progres sienten fascinación por los moros y desprecio absoluto por los españoles.Son unos traidores
Ruego al editor de este artículo que sustituya la palabra progresista por las dos palabras “de progreso”, así, con comillas. Esa gente es progresista como yo soy cura. Más bien son regresistas.
DECALOGO SOBRE COMO SOBREVIVIR A LA INMIGRACION Por Tasio residente en Hospitalet, el paraíso de la inmigración. 1- Procura no mezclarte con ellos ni relacionarte (vecinos, compañeros de trabajo, papás de los compis de colegio de tus hijos), por norma general son gente conflictiva con múltiples problemas con la justicia, con los bancos, con los vecinos y que ya eran conflictivos en su país. 2- No lleves a tus hijos a colegios donde haya mucha inmigración, es asegurar el fracaso escolar de tus hijos, además de que los aporreen y acaben siendo unos drogatas y meitdos en delincuencia. 3.-Procura residir… Leer más »
Porque la nacionalidad no es un perfil profesional. Si yo contrato a alguien, lo hago fijandome en sus cualidades y aptitudes, no en su pasaporte. Me importa un carajo de donde sea.
Porque habria de contratar un Espanol inutil y vago antes que a un extranjero con mas ganas de trabajar y las mismas cualidades.
Y sobre todo, ama a los inmigrantes porque es de ahí de donde les vienen las subvenciones
Que sí, muy bien, todo el mundo escribiendo. ¿Pero alguien va ha hacer algo? No, pues ya está.
No hay que olvidarse de la influencia importante de la elite hostíl que lleva 2000 años viviendo entre los pueblos europeos y que nos odia tanto que quiere inundar nuestros países con el tercer mundo. De esta manera estos mismos también se sienten más seguros y menos obvios como los extranjeros que son.
No, estoy de acuerdo, esto fue estudiado en su día por el filosofo Astulfo, el amigo de Cicerón, el motivo es el supuesto tamaño, Se piensa que el extranjero la tiene mas grande y claro eso genera toda clase de fantasías entre la progresia
QUE LES DEN AHORA A LOS BORREG@S PANZISTAS!!!!
Intelectual es la persona que brilla por su forma de pensar acertiva..Los que llamais “intelectuales de izquierdas”no pueden serlo puesto que el socialismo que nos venden como positivo siempre y en todo lugar, ha sido tóxico ,nefasto ,criminal ,anti humano ,sacamantecas al pueblo ,mentiroso y sobre todo DESPIADADO con los sectores sociales más debiles y desamparados.No hay que confundir listos y aprovechados “SOCIOLISTOS” con intelectuales ya que esa “doctrina”es anti objetividad y una forma más de fanatismo taliban.
DIVIDE ET IMPERA.
Porque quieren gente sumisa.los que llevamos toda la vida aqui los conocemos demasiado bien y no nos pueden controlar asi que quieren quitarnos del medio
Porque la clase trabajadora nativa son los cristianos de ley. y hay que destruirlos.
Punto.
Podemos decir tambien que la gran mayoria de los “intelectualoides” son haraganes en potencia. Es facil vivir balbuceando demagogias que doblando el lomo recogiendo trigo. Estos intelectualoides nunca han palpado un serrucho ni han acariciado un martillo. De hecho ellos creen que una fabrica es el set de una pelicula de ficcion. El intelectualoide casi siempre es cobarde. Tiene tendencia a la verborrea cuando se ve en aprietos aduciendo que detesta la violencia, todo eso producto de sus liliputienses cojones. El intelectualoide pone sus conocimientos al servicio del bravucon y del opresor violento que le oprime y siempre busca excusas… Leer más »
Desconfien de esos filantropos que buscan fuera los deberes que desdeñan cumplir en casa.
Aman al de fuera para estar exentos de amar al vecino.
HIPOCRITAS.
Nihilismo en estado puro. Han sido desprogramados anulando todos los instintos sanos y naturales del ser humano como el instinto de conservación. En lugar de esos instintos se ha llenado el vacío con dogmas relativistas y complejos de culpa dando lugar al resultado que vemos. Es la pura decadencia humana lo que estamos contemplando.
Una auténtica obra maestra de la ingeniería social en su modo más perverso.
estos son unos pillos,y realmente lo que buscan es dinero,el poder,nada mas
Jueves, 21 Julio 2016 16:48 El 60% de los inmigrantes de los CIE en 2015 no fueron expulsados Mientras varios centros de internamientos de extranjerosde toda España luchan por su cierre o no, el Defensor del pueblo ha publicado su informe con datos reveladores. Según los datos de la institución pública, en 2015 aumentó la proporción de personas que no pudieron ser expulsadas tras su encierro: en total un 59%, un 6% que en el año anterior. Los Centros de internamiento de extranjeros o CIE, llevados por la Dirección General de Policía, tienen la función de retener a ciudadanos extranjeros… Leer más »