Juan Magallón Navarro.- A mediados de este año, comenzó a cobrar fuerza la agrupación política llamada Podemos, aparentando ser gente de a pie, y representantes del pueblo. Así pues, en un principio, y antes de conocerlos a fondo, creí que podía confiar en ellos. Eran tan accesibles que incluso habían creado una cuenta de correo electronico en la que el ciudadano de a pie, podía ponerse en contacto con ellos para resolver sus dudas y hacer sus preguntas. Una cuenta para que pudiesen contactar con ellos todos los ciudadanos, sin distinción de clase social, ideologías, raza, sexo o edad, por que todos somos iguales, al menos los que no pertenecemos a la denominada “casta”. Asi pues, decidí ponerme en contacto con ellos cuando vi en su programa electoral la prohibición de la tauromaquia. Y esto fue lo que les dije:

“Hola. Vi en su programa electoral la “abolición”, o mas bien, yo diría prohibición de la tauromaquia. En primer lugar, sé que es algo que se supone que se expondrá en referéndum (espero que un referendum entre todos los españoles, y no en una asamblea para miembros de podemos), pero aún así no me parece correcto, partiendo de la base de que no se puede poner a un país entero a votar a cerca de algo que desconoce, por que si no es que una persona se acerca a conocer la tauromaquia, movida por intereses propios, el concepto que se da a la sociedad actual sobre la tauromaquia, es un toro vomitando sangre, que lógicamente, causa rechazo. Solo los verdaderos aficionados a la tauromaquia la conocen tal y como es. Por lo tanto, la gente estaría votando a cerca de algo cuya imagen está tergiversada.

Además, la tauromaquia no solo son corridas de toros, hay un amplio abanico de festejos populares muy distintos al toro de la vega, y aunque la tauromaquia fuesen solo corridas de toros, le diré que esta corriente antitaurina, está movida en la mayoría de los casos por una doble moral, que al mismo tiempo que critica e intenta prohibir que un toro bravo pase su infancia con su madre, y alcance la edad adulta en su habitat natural, para terminar muriendo en una actividad artistica reconocida por la real academia de las bellas artes (y ellos, son las unicas personas capacitadas para decidir que es arte, y que no lo es, y no usted, ni yo), apoya y financia que otros toros, y otras especies animales sean separadas de su madre nada mas nacer, para ser recluidas en un corral en el que no pueden ni darse la vuelta sobre si mismos, ni ver la luz del sol, para, al año de vida (edad en la que el toro de lidia se desteta para seguir en su medio natural hasta ser un toro adulto) ser conducidos a un matadero, a esperar su turno, viendo como matan a sus hermanos de un modo mucho mas cruel que la lidia del bravo.

Si usted quiere, digamelo y le envío un video, para que vea como los animales mueren en los mataderos, y usted mismo juzga. La carne de toro también se come. Por no hablar de los puestos de trabajo que el mundo del toro genera, y la riqueza que aporta a la economía, ¿quiere datos? Los datos hablan por sí solos. La actividad taurina genera 2500 millones de euros anualmente, 540.000 hectáreas dedicadas a la cría de toros bravos, 1355 explotaciones ganaderas, trabajo directo a 200.000 personas, 3,7 millones de jornadas de trabajo generadas anualmente que mantienen a cerca de 15.000 familias, 380 plazas de toros fijas y 2950 eventuales y unos 60 millones de espectadores mundiales que acuden cada año a un espectáculo donde hay uno o más toros. Se estima que el sector genera el 1,5% del PIB del país. ¿De verdad considera usted que es coherente su política antitaurina? Ustedes no han explicado la teoría que les lleva a pensar que la tauromaquia debe ser prohibida, solo han explicado la conclusión. Yo sí les he explicado la mía de por qué no debe ser prohibida. Mi teoría y la de ustedes son incompatibles, por lo tanto, una de las dos está mal. ¿Podrían explicarme cual de las dos está mal, y por que está mal?”.

Pasaban los días y nadie contestaba, y yo, imaginandome lo que estaba pasando, pedí a una tercera persona que les enviase otro correo. Un correo haciendo una pregunta de las que a ellos les gusta que les hagan. Se les preguntó si en caso de que podemos ganase las elecciones, todos los ciudadanos tendrían derecho a una renta mínima. Y en cuanto esa tercera persona les envió su mensaje, yo reenvié el mío, de tal manera que para llegar al mensaje de la renta minima, tuviesen que pasar por el mío por delante o por detrás. Esa persona recibió respuesta. Yo sigo esperando la mía desde hace bastante tiempo. ¿Acaso todas las personas no somos igual para podemos? ¿O ya me han dado por perdido como votante y solo están ahi para atender a sus votantes? Creía que todos éramos iguales, al menos los de la “no casta”. ¿No saben qué decirme, o no quieren decirme nada? Hay una cosa que está clara, y es que me están ninguneando. No todos los ciudadanos somos iguales para Podemos.