Confirman el descenso del AEK de Atenas por el comportamiento violento de su hinchada
El comité disciplinario de la liga griega selló esta madrugada el descenso del tradicional club ateniense AEK de Atenas a Segunda, tras adjudicar la victoria del último partido al Panthrakikos por el episodio violento protagonizado el pasado fin de semana por la hinchada del club anfitrión.
El comité disciplinario decidió fijar el resultado en un 0 a 3 y además restarle tres puntos al AEK, que al encontrarse entre los colistas finiquita su paso a segunda una jornada antes del final de la liga. Los disturbios se produjeron el pasado fin de semana cuando, en el minuto 87 y tras un gol en propia portería, el visitante se adelantó en el marcador por 0 a 1. A continuación, hinchas violentos del AEK invadieron el campo provocando la estampida de los jugadores.
La policía griega disolvió la revuelta con gases lacrimógenos, mientras que varios centenares de hinchas destrozaban el mobiliario de la grada. Poco después, el árbitro decidió suspender el partido.
El AEK, con sus 89 años de historia, uno de los clubes de más tradición de Grecia, puede apelar la sentencia a la Federación Helena de Fútbol, si bien el descenso parece inevitable. El club (Unión de Atletas de Constantinopla), fundado en 1924 por refugiados griegos expulsados de Turquía durante la guerra greco-turca, es con 29 títulos oficiales uno de los equipos más exitosos del fútbol heleno, lo que hace el descenso aún más trágico.
Deberían aprender a redactar titulares un poco mejor. Leyéndolo, se interpreta que la federación griega ha descendido a un equipo por los hechos violentos, sin considerar otra cosa. Se entiende que el equipo podría ir primero, tercero o undécimo y que, sin más, lo descienden. En cambio, resulta que lo único que han hecho ha sido darle el partido perdido por 3-0, una sanción que se contemplan en los reglamentos del fútbol en el caso que se produzcan incidentes graves por parte del público; según los reglamentos, el club local es responsable de la seguridad, eso es igual en Grecia… Leer más »