Iñigo Vallejo.- Los seguidores de la teoría de la conspiración no se salieron con la suya y el azar ha querido que no se emparejaran entre sí los equipos españoles y alemanes clasificados para las semifinales de la Liga de Campeones, como se preveía, por lo que es muy factible que se dispute una final española en Wembley, que albergará la gran cita anual del fútbol europeo el próximo 25 de mayo.

El rival más duro le ha tocado al Barcelona, que tendrá que medirse al Bayern Munich, próximo club de Pep Guardiola, que quiere olvidar el mal sabor de boca que le quedó al perder la final del año pasado contra el Chelsea en la tanda de penaltis. La ventaja para los catalanes es que la ida se jugará en el Allianz Arena y la vuelta en el Camp Nou.

El Real Madrid también disputará la vuelta de su eliminatoria en casa. Tendrá enfrente al Borussia Bortmund, que después de eliminar al Málaga gracias al escandaloso arbitraje del escocés Thomson, vuelve a la élite europea. Los blancos deben superar a un rival que ya les ha demostrado esta temporada su potencial en su camino hacia la ‘décima’.

Los partidos de ida de las semifinales de la Champions se jugarán el 23 y el 24 de abril, y la vuelta el 30 y el 1 de mayo.