La delegación barcelonesa de Plataforma per Catalunya ha hecho un llamamiento a los vecinos de la ciudad condal para estrechar el cerco sobre los lateros aprovechando el uso de las nuevas tecnologías.

La formación liderada por Josep Anglada pide a quienes sean testigos de este tipo de infracciones que lo pongan en conocimiento de la Guàrdia Urbana de Barcelona aprovechando la ventaja de la inmediatez que ofrecen las redes sociales.

Anglada ha invitado a los usuarios de Twitter a informar con los hashtags #nomedeslalata y #mercè2012 a la Guardia Urbana (@barcelona_GUB) de la posición exacta en la que se está cometiendo la infracción. “No debemos tener miedo de ser delatores de las irregularidades. Es nuestra responsabilidad como ciudadanos”.

Ante el aumento de la venta ambulante ilegal de latas de cerveza previsto para los actos de la festividad de la Mercè en Barcelona, el presidente de Plataforma per Catalunya, Josep Anglada, ha advertido que esta actividad “perjudica a los bares y locales de restauración que, al contrario que los lateros, sí pagan impuestos”.

El líder identitario ha afirmado que esta actividad “supone una competencia desleal que destruye el empleo que los restauradores crean, y contribuye a agravar la ya maltrecha situación de muchos negocios”.

Anglada ha señalado lo preocupante de los datos arrojados por el informe de seguimiento de la ordenanza de convivencia de Barcelona, que ponen de manifiesto un aumento de esta actividad, y ha instado al gobierno municipal a endurecer las sanciones para este tipo de infracciones.

Este año los decomisos por venta ambulante de bebidas en la ciudad condal entre los meses de enero y agosto han ascendido un 64% respecto al mismo periodo del año anterior. Si en 2011 hubo 203.939 decomisos este año ha habido un total de 334.121.

Anglada ha advertido que la compra de bebidas a los vendedores ambulantes “representa un riesgo para la salud del propio consumidor”, porque las latas se manipulan y se almacenan en papeleras, alcantarillas y cajas de luz en condiciones de insalubridad.

Así lo corroboran los resultados extraídos de un análisis microbiológico llevado a cabo por un laboratorio sobre varias muestras de envases de cerveza comprados a lateros en el Raval y el litoral barcelonés el pasado mes de junio.