El Real Madrid fuerza en Vitoria el quinto y definitivo partido de semifinales (66-76)
El Real Madrid ha forzado el quinto partido de la serie ante el Caja Laboral tras haberse impuesto (66-76) en el Buesa Arena, dándole la vuelta a un partido que tenía perdido por 11 puntos en el tercer cuarto y que gracias a unos certeros minutos de un entonado Sergio Rodríguez pudo darle la vuelta a la situación para mandar la eliminatoria al Palacio de los Deportes.
En los duelos anteriores, se había argumentado la buena defensa ideada por Dusko Ivanovic como la gran razón por la que el Real Madrid estaba en desventaja en la serie. Curiosamente, fue la disminución de los porcentajes de anotación de su equipo durante el partido los que dieron vida a los merengues cuando parecían noqueados.
En el duelo anterior fue Brad Oleson el hombre que ‘destrozó’ a la defensa del Real Madrid. En este volvió a ser el polaco Lampe el que como ya hiciese en la primera victoria del Caja Laboral, hiciese saltar los resortes del juego interior blanco, con 12 puntos a la conclusión de los diez primeros minutos. Mientras, el equipo de Pablo Laso volvió a tener en Velickovic a su hombre más determinante y en las buenas sensaciones ofrecidas por Mirotic en su regreso a las canchas la mejor noticia.
La polémica arbitral del anterior duelo, donde Tomic y Begic fueron excluidos por faltas y antideportivas, propició que los pívots merengues se aplicasen con menor intensidad de lo que un duelo de este voltaje requería. Por su parte, nada se le podía achacar ni a la intensidad defensiva del ‘Baskonia’ ni a la presión ambiental de un Buesa Arena que lució sus mejores galas.
Con un Sergio Rodríguez decisivo para el tiro de tres, y un Real Madrid que supo, no sólo remontar, sino mantener su ventaja ante un Caja Laboral, cada vez más impotente. En las filas blancas, además de los minutos en éxtasis del ‘chacho’, fue el serbio Novica Velickovic su mejor hombre con 22 puntos en su haber personal. De este modo, el Madrid se impuso (66-76) para salvar el ‘match ball’ y poder disputar el último ‘cara o cruz’ ante su afición.