El FC Barcelona dio un paso al frente ante Osasuna (4-0) en el partido de ida de los octavos de final de la Copa del Rey gracias a los goles de Cesc Fábregas, que estuvo delicioso, y de Messi, que culminó la goleada con un testarazo sobresaliente y un lanzamiento lejano en el tiempo añadido. Parecía que el argentino no disputaría ni un minuto por culpa de una gripe, pero salió en la segunda mitad para sentenciar la eliminatoria. El ’10’, que necesitó dos acciones para dejar su huella, marcó de cabeza en segunda línea tras un centro desde la derecha y crujió a los navarros con un disparo desde la frontal en el 90.

Osasuna, sin grandes alicientes ni motivaciones, se dedicó a defender con fiereza, pero no pudo frenar el fútbol blaugrana, estructurado nuevamente en las botas de Xavi Hernández, nombrado recientemente mejor centrocampista del mundo por cuarto año consecutivo. El de Terrasa fue el culpable de que el Barça se fuera al descanso con dos goles de ventaja. Cesc Fábregas fue el artífice, quien materializó la colectividad local. En el primero, a los 13 minutos, definió con el interior una jugada sinfónica; y en el segundo firmó una obra de arte al marcar con una sutil vaselina.

Los rojillos, que tuvieron la oportunidad de recortar distancias con un lanzamiento lejano de Lamah, no volvieron a inquietar la meta de Pinto, pero se marchan del Camp Nou con una mejor sensación que tras el partido de Liga, cuando cayeron por 8-0.

Real Sociedad, 2 – Mallorca, 0

La Real Sociedad ha dejado encarrilado la eliminatoria de los octavos de final de la Copa del Rey, después de que este miércoles, el equipo ‘txuri-urdin’ haya vencido (2-0) al Mallorca, en un buen partido del máximo artillero realista, Agirretxe. En un primer tiempo parco en ocasiones, el solitario gol de Aranburu supuso una losa para los bermellones, que no supieron devolver las tablas al marcador. Pasaba el cuarto de hora de partido, cuando Agirretxe y Aranburu se intercambiaron los papeles, puesto que esta vez fue el espigado delantero el que colgó un balón al área, para que su compañero batiese a Calatayud e hiciese el 1-0 con el que concluiría el primer acto.

En la reanudación, no sólo los de Caparrós no empataron, sino que en el minuto 55, verían disminuidas sus posibilidades de clasificación, cuando Agirretxe –renovado recientemente hasta 2015– aprovechó un balón muerto para acrecentar la cuenta local. A partir de ahí, el Mallorca lo intentó con disparos de media distancia, pero no logró perforar la malla rival, de modo que tendrá que jugarse el todo por el todo en la isla para intentar alcanzar los cuartos de final.