Pepsi utiliza restos de bebés abortados para sus productos
La denuncia de un grupo pro-vida de que la empresa internacional de gaseosas PepsiCo estaría usando líneas celulares de fetos humanos abortados para la investigación y el mejoramiento de sus productos, hizo que uno de sus accionistas presentara una resolución para que esta compañía internacional suprima esta práctica.
En agosto de 2010 PepsiCo firmó un acuerdo de cuatro años con la compañía Senomyx para desarrollar endulzantes potenciados para sus bebidas. Por este trabajo PepsiCo paga 30 millones de dólares por la investigación y futuras regalías de sus productos que en el futuro sean manufacturados con esta tecnología.
Muchas de la patentes de Senomyx involucran a la línea celular de fetos abortados con el código HEK-293, originada a partir de células de los riñones.
El aborto provocado es la eliminación o asesinato de un ser humano dentro del vientre de la madre. La doctrina católica y la ley natural coinciden en que nunca tiene justificación pues nadie tiene derecho a decidir sobre la vida de otra persona, menos la de los más débiles e inocentes, como los no nacidos.
El grupo pro-vida de Florida, Children of God for Life, escribió a ambas empresas en protesta por estas investigaciones. Senomyx no contestó, pero PepsiCo sí lo hizo, señalando que las investigaciones darían como resultado productos “de gran sabor y con menos calorías”.
Ante esta situación, un accionista presentó una resolución ante la junta de directores de PepsiCo para adoptar una política que “reconozca los derechos humanos y utilice estándares éticos que no involucren usar los restos de seres humanos abortados en investigaciones privadas y compartidas así como en acuerdos de desarrollo”.
Debi Vinnedge, director ejecutivo de Children of God for Life, señaló que cada accionista tiene “el derecho a saber la verdad sobre lo que PepsiCo está haciendo con sus ahorros duramente logrados”.
“La falta de respeto de PepsiCo a la sensibilidad moral pública solo ha servido para avivar el fuego y las amenazas al valor de las acciones, las pensiones de jubilación y las inversiones”, añadió.
También dijo que “no hay nada ético o apropiado en la manera en la que están explotando los restos de niños inocentes abortados”.
Children of God for Life ha respondido a esta situación convocando a un boicot para dejar de adquirir los productos de PepsiCo.
HazteOir.org, la plataforma ciudadana en España, ha hecho eco de esta convocatoria e informó que el boicot se extiende desde Estados Unidos a la península ibérica, Australia, Alemania, Irlanda, Escocia, Polonia y Reino Unido.
Pero por favor, infórmense antes de decir tan libremente que son restos de fetos abortados…Las líneas celulares HEK-293 son células adherentes que si bien proceden de riñón embrionario no se producen a base de “exprimir fetos” sino que se trata de una línea estable que se duplica en laboratorios de cultivos celulares y que casualmente es de las más utilizadas para investigar. Con artículos así, y con los comentarios que estoy leyendo, sin ningún tipo de rigor científico no me extraña que los investigadores españoles acabemos por irnos del país.
Ay dios!!!! ahora sé lo que lleva el SevenUP!!! querían enmascararlo con el nombre pero esto lo destapa todo!!!!!
El uso de la linea celular HEK293 (y muchisimas otras obtenidas de embriones, de tumores, de seres humanos, de animales, etc etc) esta tan extendida que me cuesta creer que exista una sola empresa dedicada a la I+D de medicamentos que no emplee muchas de ellas. Si estais en contra de su uso (que no daña a nadie, nadie mataria aun feto humano para conseguir celulas, entre otras cosas porque los abortos no deseados son mas que de sobra), por favor, dejad de utilizar medicamentos y cualquier producto de belleza. La forma mas sencilla para probar su toxicidad es precisamente… Leer más »
Pepsi se puede despedir de mí como consumidor de TODOS sus productos.
¡Que barbaridad! ¡¡Ya podían hacer como los de Coca Cola, que usan gente viva!!
Yo no bebo ningún refresco de ningún tipo…
Y cosas como esta me hacen estar cada vez más convencido de que lo que hago es lo correcto.