El alcalde de Castellón, Alberto Fabra, sucederá a Francisco Camps, que ha presentado esta tarde su dimisión, como presidente de la Generalitat Valenciana, después de ser elegido por aclamación en la Junta Directiva Regional.
Alberto Fabra ha sido finalmente el sucesor de Francisco Camps, tras la negativa de Rita Barberá de convertirse en presidenta de la Generalitat valenciana.

Rajoy intentó convencer sin éxito a la primera edil valenciana y la dirrección nacional, en coordinación con el propio Camps, optaron por ofrecer el cargo a Alberto Fabra, alcalde de Castellón. Esta es la propuesta que llevará el todavía presidente del PP valenciano en los próximos minutos a su dirección autonómica.

Rajoy ha telefoneado esta tarde a Rita Barberá, alcaldesa de Valencia y parlamentaria autonómica, para intentar convencerla de que sustituya a Francisco Camps al frente de la Generalitat Valenciana, según han indicado fuentes de la dirección nacional del PP.

Barberá habría mostrado serias reticencias ante el ofrecimiento de Rajoy, sobre todo porque su “pasión” es la Alcaldía de Valencia y, además, por la amistad que le une al propio Francisco Camps. Por ello, la primera edil se muestra reacia aceptar el cargo en estas circunstancias tan dolorosas para su compañero de partido.

Pero Génova la considera la mejor opción por muchos motivos. Cuenta con la confianza personal de Rajoy y de su equipo y, además, es uno de los personajes políticos más conocidos y valorados en la Comunidad Valenciana, según todas las encuestas que maneja el PP.

Barberá, al ser parlamentaria autonómica, puede ser elegida legalmente por las Cortes Valencias como presidenta. Si la alcaldesa de Valencia dijese finalmente que no a Rajoy, los otros dos nombres que se barajan son los de Paula Sánchez de León, vicepresidente de la Generalitat de Valencia y el de Alberto Fabra, alcalde de Castellón. La primera opción de Génova sigue siendo Barberá.