Las ratas se apresuran a abandonar el barco: Dimiten ocho miembros de la ejecutiva del PSOE en Ronda (Málaga)
Ocho de los 35 miembros de la ejecutiva local del PSOE en Ronda (Málaga), pertenecientes al llamado sector crítico, presentaron ayer su dimisión después de que la dirección del partido anunciara la intención de renovar la ejecutiva. Argumentaron que no comparten los planteamientos políticos, que hay actitudes dictatoriales y que no hay democracia interna ni transparencia. Han solicitado un informe sobre el estado económico de la agrupación así como de la campaña electoral.
Estos miembros han enviado un escrito al secretario general del PSOE rondeño, Francisco Cañestro, donde exponen motivos para su dimisión como son la “falta de democracia interna, actitudes dictatoriales, imposición de pensamiento único, falta de transparencia y ausencia total de diálogo y autocrítica”.
La dimisión se produce también por el intento de la dirección socialista de Ronda de hacer una remodelación en la ejecutiva que, según los críticos, pretende “excluir” a los que han cuestionado los planteamientos de los dirigentes “advirtiendo de posibles expedientes que pueden concluir en la expulsión del partido”, según recoge el documento.
Los miembros de la ejecutiva que han dimitido critican, además, que los dirigentes actuales no hayan entendido el mensaje enviado por los ciudadanos en las elecciones: “permanecen inertes, apoltronados e incapaces de ofrecer soluciones nuevas”.
Por su parte, la presidenta del PSOE de Ronda, Isabel María Aguilera, que es directora general de Desarrollo de Medio Rural de la Junta de Andalucía, se mostró contraria a la remodelación prevista por la dirección local: “no es oportuno ni adecuado que esta renovación deje fuera a una corriente de opinión”.
“No es el momento de hacer oídos sordos a sus críticas, no voy a apoyar ninguna remodelación que no se sustente en esos pilares”, ha sentenciado.
Precisamente, tras las elecciones y con motivo de la elección de diputados provinciales, en la comarca de Ronda hubo voces discordantes con la elección del secretario general socialista en la Ciudad del Tajo, Francisco Cañestro, para la Diputación.