E.C.- Desde hace una década, las diferentes administraciones sanitarias vienen hablando con relativa frecuencia de la carencia de médicos, lo que ha disparado en los últimos años la matrícula en las facultades de Medicina hasta tal punto que la nota exigida para acceder a estos estudios es casi de sobresaliente. Pues bien, el futuro que espera a los actuales alumnos de la carrera más larga está lleno de nubarrones.

Al menos, este es el panorama que pintan los decanos de Medicina, reunidos ayer y hoy en Bilbao. Aseguran que dentro de diez años, cuando estos estudiantes finalicen su formación, «habrá decenas de miles de médicos en España muy bien formados, que trabajarán en un supermercado o de taxistas, pero no de médicos, porque se ha planificado mal». La «ausencia» de planificación de la que hablan se concreta en «la falta de equilibrio» entre el aumento del número de plazas en las facultades y «los puestos de trabajo en vigor, las jubilaciones que se prevén y las plazas MIR». «No habrá sitio para todos», indica el secretario de la Conferencia Nacional de Decanos de Medicina, Emilio Sanz. Máximo responsable de la facultad de La Laguna, en Tenerife, Sanz destaca que ya este año los sistemas de salud de las diferentes comunidades autónomas no podrán absorber a un 20% o 25% de los especialistas que ya se han formado, por lo que estas personas «acabarán en la medicina privada subcontratada o en el paro, tras once años de formación».

Ni siquiera el MIR

A su vez, el presidente de la Conferencia y decano en Murcia, Joaquín García-Estañ, advierte del peligro de que las consejerías de Sanidad consigan, como pretenden, elevar el número de plazas en las facultades. Frente a una demanda de unas 20.000, en la actualidad se ofertan 7.000 en el conjunto de España, una cifra que considera «suficiente para la capacidad tanto de la universidad como de los hospitales». Y es que los centros sanitarios, donde se aprende la especialización (a través del MIR), «no tienen capacidad para formarlos. Están al 100% de su capacidad», dice. El Ministerio de Sanidad convoca cada año de media 6.200 plazas MIR, a las que se presentan 11.000 licenciados, con lo que se quedan fuera unos 4.000 o 5.000 aspirantes cada ejercicio.

A juicio de este experto, la «tradicional» ausencia de planificación en el sistema sanitario español comenzó en la década de los noventa cuando había un déficit de unos mil médicos al año, del que «nadie se dio cuenta hasta 2006». Esta carencia de profesionales generó un «efecto llamada» de muchos titulados inmigrantes. Prueba de ello es que, en la última década, el Ministerio de Sanidad ha autorizado a cerca de 40.000 extracomunitarios y más de 3.400 europeos para ejercer en España. Esta realidad ha generado «una distorsión porque da la sensación de que no hay suficientes médicos españoles».