Virginia García Fueyo entrevista a Isabel Pérez-Espinosa en 'Protagonistas Asturias', de Punto Radio.

«Queremos un sistema educativo que garantice el derecho de las familias a elegir el centro escolar, el modelo y el tipo de educación que quieren para sus hijos». Isabel Pérez-Espinosa presentó ayer, bajo esta premisa, la batería de medidas en materia de educación que su partido pondrá en marcha si llega al Gobierno del Principado, entre las que destaca que cada familia podrá elegir libremente el recinto escolar en el que quiere que sus hijos estudien.

La candidata del PP de Asturias sigue de este modo el modelo que la semana pasada presentaba la presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, y que generó las críticas del resto de partidos en aquella comunidad autónoma, ya que entienden que con ese criterio se corre el riesgo de que sean los centros educativos los que, finalmente, escojan a sus alumnos.

El PP asturiano sólo ve ventajas en esta idea. Con la libre elección, cada familia podrá decidir si lleva a sus hijos al colegio que esté más cerca de su hogar o, si lo prefiere, matricularlos en otros centros atendiendo a cuestiones como, por ejemplo, el tipo de educación que se imparte o si el colegio es más adecuado para la conciliación laboral de los padres.

La posibilidad de elegir centro fuera de la circunscripción asignada por el lugar de residencia sólo es una de las propuestas que Isabel Pérez-Espinosa -acompañada por los candidatos a la Junta General del Principado Susana López Ares y José Luis Pérez Díaz- enumeró ayer como resultado de una labor «que no surge de la necesidad por presentarse a unas elecciones, sino fruto de un trabajo de años de conocimiento del sistema educativo asturiano y sus carencias». Una de estas debilidades a las que hace referencia la candidata popular es el escaso nivel que existe en la enseñanza de idiomas. Para combatirlo, su partido pretende establecer el bilingüismo en las clases, de tal manera que se impartan en una segunda lengua «el 30% de las materias». Una medida cuyo éxito radicará, insistieron desde el PP, en que no se discrimine a ningún escolar por el lugar en el que resida y que este tipo de formación se extienda también a grados superiores mediante el impulso de titulaciones bilingües en la formación profesional y la Universidad.

Los conservadores se comprometen a «apostar por el asturiano» y abogan por promover un programa de religión «de calidad» en la escuela pública, con el que «se refuercen los valores éticos y la educación integral», así como establecer un convenio marco que regule las condiciones laborales del profesorado de esta materia «para que quede establecido de antemano qué es lo que tienen y deben hacer» en la aulas. Desde el PP consideran igualmente necesario crear un sistema educativo «en el que los profesionales se sientan valorados», para lo que entienden vital que se les reconozca «la condición de autoridad pública» en el ejercicio de sus funciones, actuando de este modo en la prevención de «cualquier tipo de violencia y acoso en el ámbito escolar». Y, aunque sin hablar de cifras, «porque sería una irresponsabilidad por nuestra parte ya que desconocemos los recursos», matizó Pérez-Espinosa, el PP apuesta por incrementar el presupuesto destinado a ayudas y becas para «garantizar la igualdad de oportunidades, independientemente de la situación personal, económica o social de cada uno».

Mención especial tuvo en el programa educativo del PP sus propuestas para convertir la Universidad de Oviedo en «motor del desarrollo económico de Asturias». La también ex vicerrectora de estudiantes, Susana López, explicó las intenciones del partido de desarrollar una Ley de Universidades para el Principado que ofrezca cierta libertad a la institución académica para la contratación de profesorado, así como elaborar un contrato programa para la financiación plurianual «con objetivos de excelencia» en la docencia y en la investigación. En este punto, se impulsará la concesión de becas para la «atracción de talentos de otras comunidades», que complementarán las que oferta el Estado, también en los programas de movilidad Sócrates-Erasmus.

El partido quiere además poner en marcha nuevas titulaciones de grado y máster profesional «en función de las necesidades empresariales de profesionales y de la demanda de los nuevos estudiantes» y fomentar la cultura emprendedora con la creación de viveros para empresas en los campus universitarios. «Los jóvenes no deben formarse pensando en trabajar por cuenta ajena, sino con el objeto de liderar con su esfuerzo la creación de empleo. Tenemos que trasladar a nuestros jóvenes que su futuro no pasa exclusivamente por encontrar un puesto de trabajo, sino que son los responsables de crear los puestos de trabajo del futuro», concluyó la candidata.