Irán construye un muro en su frontera con Pakistán, ¿dónde están las plañideras con lágrimas de cocodrilo?
Eduard Yitzhak.- La agencia oficial de noticias del régimen de los mulás de Irán Press TV informó el 14 de abril de 2011 que el ministro de Defensa de la República Islámica de Irán, el general de Brigada Ahmad Vahidi, había declarado que su país [Irán] estaba construyendo con rapidez un muro en su frontera con Pakistán, y que “la barrera de contención y construcción de carreteras a lo largo de la frontera con Pakistán se lleva a cabo en el impenetrable terreno montañoso [en el sureste de Irán] con precisión y calidad”.
El ministro de Defensa iraní añadió que “la barrera fronteriza impediría que los villanos cruzasen a la República Islámica y ayudaría a la región [fronteriza iraní] a realizar su potencial económico”.
Press TV apostillaba en su nota informativa que “Es sabido que el grupo Yundullah, con sede en Pakistán, penetra en la provincia iraní de Sistán-Baluchistán para llevar a cabo atentados terroristas.
El 15 de diciembre, un ataque terrorista tuvo lugar en la mezquita del Imán Hussein en la ciudad de la provincia de Chabahar, donde la gente conmemoraba el martirio del tercer apóstol chiíta, el imán Hussein.
Jundullah líder Abdolmalek Rigi fue detenido por las fuerzas de inteligencia iraní en febrero de 2010 y ejecutado en junio por 79 cargos de crímenes, incluyendo robo a mano armada y operaciones de bombardeo y los ataques armados contra policías y civiles”. Informaciones de prensa de la región sugieren que puede llegar a medir 700 kilómetros y que su altura alcanza los 3 metros.
Los baluchis, que habitan en ambos lados de la frontera y también en el área limítrofe de ambos países con Afganistán -muchos de los cuales quisieran ver la región como un ente autónomo o incluso independiente- han quedado ahora divididos por el muro.
El régimen islámico de Irán oprime nacional y religiosamente a las minorías y sunnitas
La región de Sistán-Baluchistán está compartida por Irán, Pakistán y Afganistán, cuyas zonas fronterizas se consideran rutas de contrabando, en las que se incluyen armas y opio. Más del 90 por ciento mundial de opio surcan estas rutas fronterizas.
Al sureste de Irán se encuentra el Sistán-Baluchistán iraní, poblada mayormente por los casi dos millones y medio de baluchis, que hablan lengua baluchi y son sunnitas, en un territorio 181.785 km² fronteriza con Pakistán y Afganistán.
Cada vez más, Teherán ha crecido preocupado por la influencia de los talibanes y Al Qaeda en Pakistán y Afganistán en los grupos criminales y militantes que operan en el lado iraní de la frontera.
Aparte de su tráfico de drogas y la anarquía, la región es vista por Teherán como una zona prioridad de máxima seguridad debido a la estrecha relación de Pakistán y Afganistán con su archienemiga Arabia Saudita. Las dos potencias islamistas (Irán y Arabia Saudita) han respaldado a los poderes rivales en todo el Oriente Medio.
Teherán ha culpado a la Arabia Saudita de apoyar a los insurgentes sunnitas, como Yundallah, “el Ejército de Alá”, que combate contra el régimen chiíta de Teherán.
El islamismo chiíta considera enemigos del Islam en primer lugar a los no-musulmanes [a los judíos y cristianos] y en segundo lugar a los musulmanes sunnitas.
También viceversa, el islamismo sunnita considera enemigos del Islam en primer lugar a los no-musulmanes [a los judíos y cristianos] y en segundo lugar a los musulmanes chiíta. Irán reprime a los reprime a los sunnitas iraníes con la ayuda de los combatientes del Hisbulá libanés.
Elaph.com el 05.10.07 citaba fuentes iraníes de la provincia de Arabistán, conocida también bajo el nombre del Ahwaz (Suroeste), según las cuales las autoridades iraníes utilizan, en la represión de las poblaciones de origen árabe (sunnitas) en esta región, elementos extranjeros, en particular, árabes libaneses del Hisbulá.
Las mismas fuentes afirmaban que “se desplegó a combatientes chiítas extranjeros, procedentes del Líbano, de Afganistán y de Irak para entrenarse en los campos de los Guardianes de la Revolución, en particular, en el campo Al-Fadjr, en las permanencias de la policía iraní para reprimir los dos mil obreros de las fábricas de azúcar de Tall Sabaa al norte de la provincia. Los obreros están en su quinto día de huelga, añadía MediArabe.info, para protestar contra el impago de sus salarios desde hace varios meses. Los Guardianes de la Revolución los reprimen con los milicianos chiítas árabes extranjeros.”
La TV ANB emitió un programa de debate el 7 de septiembre de 2007 sobre como tratan las autoridades iraníes a la población árabe de Irán, en el cual miembros del Partido Solidaridad Democrático Al-Ahwaz explicaban la persecución de poblaciones árabes por la autoridades iraníes en la Provincia Al-Ahwaz en Irán.
Los habitantes de Sistán-Baluchistán son árabes sunnitas, Zahedan, capital de provincia de Sistán-Baluchistán, la provincia más de 1000 millas al sudeste de Teherán. Esta zona, cercana a Pakistán y Afganistán, es un área clave para el tráfico de estupefacientes.
Los baluchís tienen prohibido predicar el Islam sunnita, y mayormente quieren la independencia de Irán. Un sunnita baluchí se autoinmoló el domingo 18 de octubre de 2009 explotando en una reunión de jefes tribales en la provincia Sistán-Baluchistán con los comandantes de la Guardia Revolucionaria, en la que varios comandantes del yihadista cuerpo de la Guardia del Cuerpo de la Revolución Islámica.
Treinta personas, entre ellos varios altos mandos de la Guardia Revolucionaria, murieron en un atentado islamikaze en una ciudad en el sudeste de Irán la frontera con Pakistán. En el ataque resultaron más de cuarenta heridos. El objetivo declarado de levantar el muro en la frontera irano-pakistaní no ha suscitado el menor interés en la prensa internacional.
Pero se han vertido ríos de tinta para criticar la valla de seguridad, con algunos kilómetros de muro, para separar frenar el terrorismo árabe-palestino e islamista.
Muros a lo largo del planeta que tampoco suscitan quejas
Arabia Saudita, Pakistán, Afganistán apoyan el islamoterrorismo sunnita contra el régimen chiíta de los mulás de Irán, y viceversa, Irán apoya a los grupos islamoterroristas chiítas en Arabia Saudita, Pakistán, Afganistán, en el Líbano para amedrentar a los sunnitas.
Israel no apoya ningún grupo islamoterrorista, sólo busca defenderse del zarpazo islamoterrorista. Y es en base a su propia defensa que levanta una valla de seguridad. Los judeófobos europeos, mayormente en las filas de la extrema izquierda, sólo tienen interés en estigmatizar y demonizar a Israel.
No cuentan para nada los muros que Arabia Saudita ha levantado en su frontera con Yemen, ni tampoco el que Arabia Saudita ha levantado a lo largo de su frontera con Irak, de 900 Km. ni el que los musulmanes turcos levantaron en la misma Unión Europea, en la isla de Chipre para aislar a los cristianos grecochipriotas, ni el que en Irlanda existe desde hace más de 30 años un muro para separar católicos de protestantes, también han sido cortadas calles para terminar con los ataques terroristas. Barrios enteros de Belfast han sido desalojados con el mismo fin.
Tampoco son relevantes para estos judeofobos las vallas en las ciudades españolas de Ceuta y Melilla, para evitar la entrada en España de emigrantes africanos, o el de los EEUU en su frontera con Méjico, también para evitar la entrada de emigrantes-, o el que Marruecos ha erigido en los 2.720 Km, conocido como “cinturón de seguridad”, para “protegerse” del Frente Polisario, una vez descolonizado el Sahara por España.
Corea del Sur se protege de Corea del Norte, sin renunciar a la reunificación, con un muro a lo largo de toda la frontera. La India ha construido su muro de 3.300 Km a fin de marcar su separación de Pakistán en su territorio en litigio.
Botswana ha construido un muro electrificado en toda su frontera con Zimbabwe, oficialmente para impedir la entrada de animales domésticos contaminados, pero en realidad es para limitar la entrada de refugiados que escapan de las masacres étnicas. Tailandia levantó en 2007 un muro en toda su frontera con Malasia para evitar la entrada de islamoterroristas malayos Pakistán ha levantado un muro a lo largo de sus 2.400 Km. de frontera con Afganistán. Uzbekistán tiene otro muro a lo largo de su frontera con Tadjikistán. Los Emiratos Árabes Unidos tienen otro a lo largo de su frontera con Omán. Kuwait ha reforzado del muro de toda su frontera con Irak, de 215 Km.
Ningún muro de estos es importante, sólo el que los israelíes han levantado en medio del estado judío para evitar islamoatentados, ¡¡este si que es importante !! para los antisemitas.
Gracias a la valla de seguridad, entre el 2002 y el 2008 el número de víctimas de atentados islamikazes en Israel cayó de 451 a 7. Esta disminución representa un descenso del 98,5 por ciento. Para los antisemitas es una vergüenza que los judíos defiendan sus propias vidas.
Cuando los árabes marroquíes oprimen a los árabes saharauies, los árabes sudaneses a los negros musulmanes de Darfur, los iraníes a los árabes de las provincias árabes de Irán, el mundo árabe ignora totalmente a los opresores, aunque las víctimas sean árabes.
Sólo se indignan cuando las víctimas árabes “pueden” ser imputadas a Israel, independientemente de la falsedad de la recriminación. El muro que los mulás de Irán levantan en medio de la región del Baluchistán no merece ni el menor ni el más remoto cometario en la prensa. ¿Para qué, si no se puede imputar a los israelíes?
El verdadero problema de Baluchistán y del que no se quiere hablar es el alto indice en esta région de masturbadores compulsivos, un gran numero de personas se la cascan hasta tenerla en carne viva, y claro esto no interesa que se sepa, y sin embargo se habla del muro. ¡Cuanta hipocresia!