Las coincidencias repugnan a la razón humana cuando traspasan cierto número. En este caso, aunque el número es sólo de dos, a falta de otras investigaciones, la razón vacila. Manuel Chaves, siendo presidente de la Junta de Andalucía, fue a los actos inaugurales o festivos de dos empresas, Minas de Aguas Teñidas y Bogaris, cuyas direcciones acababan de beneficiar a sus hijos. A Paula Chaves, la empresa minera le aportó un contrato como apoderada de la empresa que luego se vio recompensado con una subvención de 10 millones de euros. En el caso de Bogaris, pagó 28.000 euros a Iván Chaves por un informe y se vio beneficiada con la presencia del presidente Chaves con motivo dfe su XX aniversario.

Presencia de Chaves en Bogaris

La compañía sevillana Bogaris, multinacional dedicada a la promoción inmobiliaria, las energías renovables, el reciclado y la agroindustria, celebró su 20 aniversario el 3 de diciembre de 2008 en el Monasterio de la Cartuja de Sevilla. El acto estuvo presidido por Manuel Chaves, entonces regidor de la Junta de Andalucía, acompañado por el alcalde de Sevilla, el socialista Alfredo Sánchez Monteseirín.

De la mano de Rodrigo Charlo, presidente de la empresa, y ante una nutrida representación del mundo político, económico y social andaluz, Manuel Chaves “felicitó a la compañía y mostró su apoyo a las futuras iniciativas de Bogaris”, según informó el diario ABC en su edición de Sevilla el día siguiente.

Lo que no dijo Manuel Chaves y lo que sólo conocían algunos de los presentes es que la misma empresa ante la que el presidente de la Junta se deshacía en elogios acababa de encargar un trabajo muy bien remunerado a su hijo. Concretamente, Bogaris contrató a Iván Chaves para que desde diciembre de 2008 –coincidiendo con el acto apadrinado por el presidente andaluz- hasta marzo de 2009 presentara a inversores un informe titulado “Pasado, presente y futuro del aceite de oliva virgen en el mundo: Propuesta de inversión”.

Iván Chaves cobró a Bogaris por este trabajo 28.188 euros, tal y como refleja la factura emitida por su empresa, Cexmark Soluciones S.L., con fecha 1 de abril de 2009. Según el documento, la labor del hijo del actual vicepresidente tercero del Gobierno únicamente consistió en la presentación del informe, no en elaborarlo. Bogaris, al igual que los Chaves, ha declinado explicar qué trabajos hizo el hijo del entonces presidente autonómico y si consiguió a los inversores de los que habla la factura.

El presidente de Bogaris y cliente de Iván Chaves, Rodrigo Charlo, destacó en el XX aniversario que “el crecimiento ha sido posible gracias al esfuerzo y la dedicación del equipo humano que integra Bogaris junto con el apoyo recibido por parte de clientes, proveedores, sin olvidar la estrecha colaboración mantenida con las distintas administraciones”, según las declaraciones textuales que publicó ABC.

El posado sonriente de Chaves

Por su parte, Manuel Chaves destacó en su intervención que Bogaris realiza una “importante labor de atracción de multinacionales a nuestra Comunidad”, informaba Efe. Chaves padre recordó que esta empresa presenta “un modelo económico más justo, sólido y sostenible en el tiempo”. Tras su discurso, el presidente de la Junta posó sonriente con la cúpula directiva de la empresa, que publicó las fotos en su memoria de actividades del año 2008.

Bogaris obtuvo a cierre de 2009 unos beneficios de 26,6 millones de euros, un 40,9% más que en el año anterior. Entre las actividades de su división de agroindustria, Bogaris Agriculture S.L.U., a la que facturó Iván Chaves, está la producción de aceite de oliva en países como Chile. Iván Chaves se dedica al negocio de la intermediación y se define como “comisionista” en los contratos que firma con sus clientes.

Es Manuel Chaves el que va a la empresa minera el 6 de noviembre de 2007, justo después de ser contratada su hija en la empresa. Paula Chaves Iborra, según documentación del Registro Mercantil de Huelva que obra en nuestro poder era apoderada de la empresa MATSA, dentro del departamento jurídico, desde el 12 de noviembre de 2008. Este extremo lo confirmó la propia empresa Minas de Aguas Teñidas en un comunicado, donde, además de negar indirectamente cualquier trato de favor de la Junta, se afirmaba que Paula Chaves Iborra es «empleada de MATSA desde julio de 2007», en concreto, «responsable del departamento jurídico, ostentando facultades de representación de la Compañía”.

Entre las funciones del departamento jurídico donde trabaja la hija del ex presidente de la Junta están, según esta empresa, «la gestión de contratos, el asesoramiento legal interno de todas las áreas, la gestión y tramitación de incentivos y ayudas y la representación de la sociedad ante cualquier notaría, registro o administración pública». Por todas estas razones, entiende el PP, debería haberse abstenido Chaves de firmar la subvención de 10 millones de euros que concedió la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía para esta sociedad, máxime, cuando en el expediente que reclamaba esta ayuda, como señalan fuentes populares, figuraba el nombre de la hija del ex presidente.

Antes de realizar su visita por las instalaciones mineras, Chaves se refirió a Aguas Teñidas como “uno de los principales proyectos mineros de Europa” y agradeció la apuesta de la empresa propietaria de la mina su “apuesta por Andalucía a través de una gran inversión que supera los 220 millones de euros”.

El presidente de la Junta resaltó que, “aunque la globalización, que es un prisma de 1.000 caras, conlleva muchos problemas, también ofrece oportunidades como la de este proyecto” y añadió que “si bien el aumento de la demanda de energía de países emergentes como China o La India provocan subidas de los precios, sobre todo, en el petróleo, también posibilitan el aumento de los precios de otras materias, como los minerales, que permiten la rentabilidad de minas como la de Aguas Teñidas”.

Naturalmente, Chaves no desveló la relación que unía a su hija con la empresa.