Ya son 104 las víctimas mortales confirmadas en la estampida de peregrinos hindúes en Kerala (sur de India), que se suman a otros 50 heridos, siete de ellos de gravedad, según informa la emisora NDTV. El incidente se originó por la irrupción de un todoterreno fuera de control en un campamento de peregrinos, según ha informado el comisionado especial de Sabarimala, Rajendra Nayar. El accidente del vehículo -que de por sí mató a varios devotos- provocó la estampida humana, “en la que perdieron la vida la mayoría de los fallecidos”, ha precisado Nayar.

Las tareas de identificación y recogida de cadáveres se está viendo dificultada por lo aislada que está la zona y por su relieve montañoso. Los servicios de rescate, bajo la supervisión de la dirección general del estado y la Secretaría de Interior, siguen rastreando el lugar en busca de los más de 10 niños que se presumen desaparecidos, un dato todavía sin confirmación oficial.

El Ejecutivo indio, con el primer ministro Manmohan Singh a la cabeza, ya ha expresado sus condolencias en lo que es la cuarta estampida humana más letal de la historia del país. Uno de los miembros del servicio de rescate, Aneesh, se ha declarado consternado por la magnitud de la tragedia. “En la vida he visto una multitud como la que se concentró allí. El flujo de peregrinos superó todas nuestras expectativas”, ha explicado.